Si. Realmente, añoro el sonido de tu voz#
y las caricias de tus labios.
Echo de menos el calor de tus palabras, y el rubor de tus pestañas al pronunciar cualquier frase.
Extraño tus mejillas sonrojadas ante cualquiera de mis movimientos, y el amor con el que dejabas que te tocara, y te meciera entre mis brazos.
Te echo tanto de menos, mi vida..
¿Que nos pasó? ¿Porque te fuiste?
[Ahora solo me queda el recuerdo, restregándome por la cara, que te has ido, para no volver]
Que triste es saber, que tu sabor no volverá a ser mío.
Pero más triste es saber, que tus labios no volverán a posarse en mi piel, en forma de abrigo.
Comentarios
Publicar un comentario