Nunca la quisiste.

Podría darte mil razones de porqué no lo hiciste. Podría decirte, que no regalas besos a otras bocas, cuando amas a alguien. Que no das calor a otro cuerpo, cuando tu olor pertenece a otro completamente distinto. Pero solo una razón me bastará para callarte completamente la boca.
No se deja a la persona a la que quieres.
Simplemente,
[no se abandona a su suerte, a la persona a la que amas].

Comentarios

Entradas populares de este blog

Angustia.

Canta.

Siempre he sentido una atracción irremediable hacia aquello que sabía que estaba destinado a destruirme, un gusto voraz por lo roto y lo astillado.