sábado, 17 de diciembre de 2011

Que excitante debe ser

estar en tu cama. Aspirar tu aroma, y sentirte junto a mí. Notar como tu pelo se empapa de ese sudor perlado que tan atractivo te hace. Y ver como las gotas caen por tu espalda mientras mis uñas se debaten entre arañazos o caricias. Tocar tus brazos y que se tensen bajo mis manos. Notar tus temblores como si fueran míos, y sentir tu boca sobre mi piel. Tócame como si fuera la última noche que lo haces, y llévame a lugares en los que nunca pusiste un pie, ni el alma. Hazme tuya y no me dejes nunca.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Rebirthing

 El principio de todo lo que conozco se quedó pequeño cuando empezaste a existir. Cuando tú descubriste mi mundo, o él te descubrió a ti. Va...