lunes, 14 de noviembre de 2011

Te echo de menos en las distancias cortas

Y en las largas. Te necesito en mi cama, y en mi corazón. Con cada poro de mi piel, y de mi ser.
Sin ti nada es lo mismo, y contigo todo es distinto.
Hay muchas maneras de decir lo mismo sin parecer repetitiva, pero sinceramente, me da igual aparentarlo.
Te amo. Te amo joder. Te amo.
Y no lo supe ayer, ni hace una semana.
Hace mucho tiempo que se que te amo, más que a nada, más que a nadie.
Y sin embargo, el miedo no me deja avanzar. Porque decirte lo que siento no te descubrirá nada que no sepas.
Porque me tienes, y me dejas. Porque puedes recogerme, y aún así, me dejas caer. Es horrible la sensación de vértigo que siento al estar entre tus brazos.
Eres como un veneno para mi ánimo, pero eres el antídoto contra mi soledad.
Nunca quise necesitarte tanto, pero ahora estoy perdida.
[No eres una causa perdida. Eres dolor.]

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Rebirthing

 El principio de todo lo que conozco se quedó pequeño cuando empezaste a existir. Cuando tú descubriste mi mundo, o él te descubrió a ti. Va...